El modelo Ikigai es un concepto japonés que puede traducirse como “razón de ser” o “motivo para vivir”. Es una herramienta de autorreflexión que ayuda a encontrar un propósito significativo en la vida, combinando cuatro áreas clave:
Los 4 elementos del Ikigai:
Lo que amas (Pasión)
Aquello que disfrutas hacer profundamente.
Lo que el mundo necesita (Misión)
Aquello que contribuye a los demás o tiene un impacto positivo.
Por lo que te pueden pagar (Profesión)
Aquello por lo que podrías generar ingresos.
En lo que eres bueno (Vocación)
Tus talentos, habilidades o fortalezas.
Cuando se superponen estos elementos:
Pasión= Lo que amas + En lo que eres bueno
Misión= Lo que amas + Lo que el mundo necesita
Vocación= Lo que el mundo necesita + Por lo que te pueden pagar
Profesión= En lo que eres bueno + Por lo que te pueden pagar
Tu Ikigai está en el centro, donde coinciden los cuatro aspectos. Es aquello que:
Te apasiona
Eres bueno haciendo
Tiene valor para los demás
Es sostenible económicamente
¿Para qué sirve el modelo Ikigai?
Para orientarte profesionalmente o en momentos de cambio.
Para buscar mayor sentido o motivación en tu vida diaria.
Para alinear tus decisiones personales y profesionales con tus valores.
APLICACION EN UN PROYECTO
Aplicar el modelo Ikigai a un proyecto es una excelente forma de alinearlo con un propósito significativo, asegurar su sostenibilidad y aumentar el compromiso del equipo. A continuación te explico cómo usar el modelo Ikigai en el contexto de un proyecto:
Modelo Ikigai aplicado a un proyecto
Elemento Ikigai
En un proyecto significa...
Lo que amas
¿Qué parte del proyecto entusiasma al equipo? ¿Qué los motiva emocionalmente?
Lo que necesita el mundo
¿Qué problema real resuelve? ¿Aporta valor a la comunidad, clientes o sociedad?
Por lo que te pueden pagar
¿Es económicamente viable? ¿Tiene demanda o puede atraer recursos/inversión?
En lo que eres bueno
¿El equipo tiene habilidades y conocimientos adecuados para ejecutarlo con calidad?
Preguntas clave para guiar tu proyecto con el modelo Ikigai
Lo que amas
¿Qué nos entusiasma de este proyecto?
¿Qué parte del proceso o impacto nos llena de energía?
Lo que el mundo necesita
¿A quién beneficiamos?
¿Qué necesidad o dolor resolvemos?
Por lo que nos pueden pagar
¿Quién pagaría por esta solución?
¿Puede convertirse en un producto/servicio rentable?
En lo que somos buenos
¿Tenemos las competencias necesarias?
¿Qué nos diferencia o destaca frente a otros?
Resultado: Ikigai del proyecto
Cuando tu proyecto cumple con los cuatro criterios, estará alineado con un propósito sólido, tendrá impacto, será sostenible y contará con la motivación real del equipo.
¿Ejemplo rápido?
Proyecto: Plataforma para ayudar a adultos mayores a acceder a servicios médicos en línea.
Lo que amas: Ayudar a personas vulnerables, usar tecnología para el bien común.
Lo que el mundo necesita: Mejores accesos a la salud para mayores.
Por lo que te pueden pagar: Posibles convenios con seguros, clínicas, usuarios premium.
En lo que eres bueno: Desarrollo de apps, experiencia en UX y salud digital.

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